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¿Estáis preparados para recibir a esos pequeños duendecillos, demonios y fantasmas? No, no estamos hablando de esas figuras inquietantes que se esconden pidiéndote truco o trato....Nos referimos a la cantidad de bacterias dañinas alojadas en la boca tras un atracón de dulces y golosinas.
No es ningún secreto que Halloween es una de las fiestas más populares en los Estados Unidos. En Europa, son muchas ciudades, las que han decidido importar la manera en la que los Estados Unidos concibe Halloween celebrándolo con fiestas y disfraces. El hecho de que esta fiesta haya llegado hasta nuestros días, se debe al enorme despliegue comercial y de publicidad. Todos tenemos grabada la imagen en películas de niños corriendo por calles oscuras disfrazados de fantasmas, duendes, demonios o cualquier otro personaje de terror y llamando a las puertas de las casas pidiendo dulces y golosinas.
Durante esa noche, los espíritus visitaban las casas y para no molestar a sus habitantes, los lugareños debían de poner una vela en la ventana de la casa por cada difunto que hubiera en la familia. En caso de que hubiera una vela en recuerdo de cada difunto, los espíritus no perturbaban a sus familiares, pero en caso contrario, les hacían caer en terribles pesadillas por la noche.
Actualmente, los niños, disfrazados, corretean pidiendo casa por casa dulces. Tras llamar a la puerta, pronuncian la famosa frase “truco o trato” (en inglés trick or treat ). Si les dan caramelos (por lo general) o alguna otra recompensa, se sobreentiende que aceptan el trato, pero en caso contrario, si se negasen, los niños gastarán alguna pequeña broma como tirar huevos,….
Sin embargo, con la emoción de disfrazarse y comer un montón de chuches nos olvidamos de algunas consecuencias no tan divertidas. Estamos hablando del ácido destructivo y de la pegajosa babilla que se forma en la boca durante Halloween después de tanta ingesta de azúcares.
Es conocido que el azúcar que consumimos es aprovechado por las bacterias de nuestra boca para alimentarse. Ello hace que se produzcan ácidos que pueden disolver lentamente el esmalte del diente y provocar caries.
¿Qué puede hacer para ayudar a su boca durante la temporada de Halloween?
Los chicles, caramelos y pastillas con xilitol pueden ser buenos para los dientes.
Es inevitable comer dulces durante Halloween. Sin embargo, los productos con xilitol pueden ayudar a suprimir las bacterias productoras de ácido. Los estudios demuestran que el xilitol ayuda a mejorar la salud de la boca mediante la inhibición de la formación de dichas bacterias lo cual no forma la placa. El xilitol endulza tanto como el azúcar y es más beneficioso para la salud de la boca. Así que si vuestros hijos quieren algo dulce y ya han cubierto su cuota de golosinas, no estaría mal darles algunos de estos productos Xylitol. Les encantará su sabor. Así que hazlo por ellos, por su salud y por la de sus dientes.
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